Fundación ECOTIC, la Asociación Española de Recuperadores de la Economía Social (AERESS) y Obra Social Caja Madrid ponen en marcha el proyecto “Juguetes con mucha vida”, una iniciativa destinada a promover y fortalecer los procesos de recogida, reparación, reutilización y reciclaje de juguetes fuera de uso como vía para la prevención de la contaminación asociada a los residuos urbanos. El proyecto empieza coincidiendo con la Navidad y se extenderá durante un año.

La iniciativa combina acciones técnicas y participativas, con el objetivo de informar y sensibilizar sobre los residuos generados por los juguetes a la sociedad en general, y con especial énfasis en la población infantil y los trabajadores y agentes clave en la gestión de dichos residuos. Para ello, se llevarán a cabo una serie de iniciativas destinadas a los distintos públicos.

Se realizarán jornadas destinadas a profesionales relacionados con el mundo de los juguetes, estableciendo grupos de trabajo en los que se intercambiarán experiencias.

En el Manual Técnico de Procesos y Buenas Prácticas para la reutilización y preparación para el reciclaje de los juguetes fuera de uso, se abordarán métodos de recogida y flujos de entrada, la identificación de tipos de juguetes, los procesos de manipulación, la selección apta para donaciones y venta de segunda mano, y el análisis de la estructura y logística necesaria, así como de sus costes.

El material informativo del proyecto se articulará en torno a cuadernillos informativos, espacios en las redes sociales, y una sección en la página web.

Los talleres de reparación y valorización de juguetes, dirigidos a jóvenes de entre 6 y 12 años y articulados en torno a juegos, se desarrollarán en 6 comunidades autónomas, caracterizando los distintos tipos de juguetes y sus componentes reutilizables y reciclables, así como sus impactos ambientales. Una colección de juguetes itinerante, y 8.200 cuadernillos editados en 3 lenguas, acompañarán la iniciativa.

La vida de los juguetes actuales es más corta, debido tanto a su creciente complejidad estructural como a la mayor rapidez en la pérdida de interés. La percepción de los consumidores es que no se trata de residuos, y mucho menos potencialmente peligrosos, por lo que suelen acabar en la basura doméstica; pero aproximadamente el 10% de los juguetes tratados están compuestos de materias peligrosas como pilas, baterías, etc.

De este modo, los juguetes y los pequeños aparatos eléctricos representan entre un 5 y un 6% de los residuos urbanos, lo que permite hacerse una idea de la importancia de su adecuada gestión. Según datos de la Fundación Ecotic, en España el 2% de juguetes recogidos en los puntos limpios contrasta con el 11,11% registrado en Europa, por lo que deben potenciarse las iniciativas destinadas a la información y la sensibilización.